domingo, 7 de mayo de 2017

Imputan a 3 altos jefes policiales por "extorsión y malversación"

Imputan a 3 altos jefes policiales por extorsión y malversación
Fueron imputados por "extorsión y malversación", acusados de retenerle una parte del sueldo a efectivos de la delegación Custodia y Traslados de Detenidos en Quilmes. También, se los investiga por presunto desvío de fondos que el Ministerio de Seguridad entrega para pagar el combustible de los patrulleros.


Este jueves por la noche, la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) N° 7 de Quilmes, bajo las órdenes de la doctora Ximena Santoro, llevó adelante cinco allanamientos simultáneos, en el marco de una causa en la que están comprometidos el comisario, la subcomisaria y el capitán de la dependencia ubicada en avenida Mosconi y Camino General Belgrano.


Los registros judiciales se desarrollaron en la sede policial, como así también en el Cementerio Israelita de Berazategui y en los puestos de la Policía Bonaerense que custodian oficinas del Departamento Judicial en Quilmes y las correspondientes descentralizadas de Berazategui y Florencio Varela.

Fuentes judiciales revelaron a DIARIO POPULAR que la investigación comenzó con una denuncia anónima, que ingresó por mesa de entrada en la UFI de la fiscal Santoro. Desde ese momento, la representante del Ministerio Público cosechó pruebas contundentes al tomar declaración testimonial a una decena de efectivos que fueron víctimas de las maniobras extorsivas.

Según sospechan, los miembros de la cúpula exigían a sus subordinados la entrega de dinero en efectivo correspondiente al pago de las “horas CORES” que percibían como parte del sueldo. En caso de que se negaran a hacerlo, recibían castigos tales como el traslado a lugares desfavorables, o bien la modificación de sus horarios de trabajo para que no pudieran hacer las llamadas “Adicionales”, que son las horas extra (mejor remuneradas que las CORES) que cada policía consigue de manera individual, para trabajar en la custodia de bancos o supermercados, entre otros lugares.



Aunque aún resta el análisis de la documentación secuestrada en los allanamientos, los investigadores estiman que unos 65 policías sufrían este tipo de extorsiones, de una plantilla integrada por 128 efectivos. Asimismo, calculan que a cada uno de los trabajadores le retenían entre 5 mil y 8 mil pesos mensuales.


En la misma causa, la doctora Santoro investiga “la caja” de la delegación Custodia y Traslados de Detenidos en Quilmes, en base al desvío de partidas presupuestarias que el Ministerio de Seguridad Bonaerense entregaba para pagar el combustible de los patrulleros.

De acuerdo a las sospechas de la fiscal, los jefes policiales no informaban la cantidad exacta de móviles fuera de servicio y ese dinero lo utilizaban para cargar combustible en autos particulares, o canjeaban el dinero en estaciones de servicio, que les retenían el 30 por ciento para emitirles la factura.

Diario Popular

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