La CAME denunció este lunes que la venta ilegal llegó en agosto a 4.396 millones de pesos en un relevamiento de 454 ciudades de todo el país, que concentra al 80% de la población.
Osvaldo Cornide, presidente de la entidad, advirtió sobre la existencia de “un doble problema, porque parte de ese dinero va al narcotráfico y otras actividades delictivas”.
La Ciudad de Buenos Aires y el partido de Lomas de Zamora son las dos ciudades con mayor nivel de informalidad, según el mapa presentado por esa organización empresaria.
Después de Buenos Aires, las ciudades con mayor informalidad son Lomas de Zamora, La Matanza, Florencio Varela, Lanús, La Plata y Escobar.
En el seminario organizado por CAME participó el representante de Interpol en Argentina, Stefano Betti, quien afirmó que “el margen de rentabilidad del comercio ilegal es mayor al que tiene el tráfico de cocaína o heroína en el mundo”.
El funcionario reclamó “penas más severas” para combatir la venta ilegal.
Betti señaló que en el mundo “detrás de las falsificaciones y la venta ilegal hay grupos criminales organizados” y admitió que los países “pueden reducir” la marginalidad comercial, “pero su erradicación es muy difícil”.
Explicó que ese delito en el mundo “tiene un muy bajo riesgo, porque tiene penas que no privan de la libertad y a lo sumo llegan a multas financieras”.
Dijo que en el mundo “hay una cultura generalizada sobre que la violación de derechos intelectuales o ventas de falsificaciones, no es muy grave, pero hoy en día hay hasta falsificaciones de medicamentos que hacen peligrar la vida de las personas”.
“Se puede hacer mucho, pero no hay soluciones mágicas, y se puede amenguar, pero no eliminarlo del todo”, reiteró Betti.
El representante de Interpol sostuvo que en la mayoría de los países “no hay políticas coordinadas, cada ministerio aplica su propia política contra la venta ilegal y son pocos los resultados que se consiguen”.
Opinó que para combatir la venta ilegal se deben “modificar las leyes para aplicar penas más severas y coordinar acciones con la intervención de una gama muy amplia de actores, y trabajar en forma conjunta”.
Fabián Castillo, secretario de relaciones Institucionales de CAME, afirmó que la entidad está analizando “un proyecto de ley que penalice no sólo a los manteros o vendedores ilegales, sino que también castigue a todos los integrantes de la cadena ilegal”.
Castillo presentó los resultados sobre el mapa de venta ilegal y dijo que en el país en agosto pasado se detectaron 77.909 vendedores ilegales de los cuales 47.053 fueron empleados de las denominadas “saladitas” y 30.856 vendedores en la vía pública o manteros.
Según el dirigente, la venta ilegal equivale al 10,2% de las ventas minoristas legales, y una pérdida en impuestos para el Estado estimada en 11 mil millones de pesos anuales.
De acuerdo con el informe, la Ciudad de Buenos Aires concentra casi el 20% de las ventas ilegales en todo el país y calculó que en agosto pasado alcanzaron a los 850 millones de pesos.
Después de Buenos Aires, las ciudades con mayor informalidad son Lomas de Zamora, La Matanza, Florencio Varela, Lanús, La Plata y Escobar.
También registraron altos índices de venta ilegal Tucumán, Bariloche, Concordia y San Salvador de Jujuy.
diariobae.com
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