lunes, 22 de septiembre de 2014

El Tribunal de Cuentas plantea incompatibilidades en la aprobación de las cuentas del 2013.



(Luis Demitre) Los Concejales del “Frente Renovador” y de “Nuevo Encuentro” se retiraron de la sesión denunciando una falta grave a la honorabilidad del cuerpo, por el voto de tres ex funcionarios, devenidos Concejales, que no debieron participar en la aprobación de las cuentas del año 2013.



Evidentemente se presenta un dilema ético cuando un Concejal, en uso de sus atribuciones, debe aprobar gastos ejecutados durante su gestión como funcionario. Sin embargo esto sucedió.

Fue durante la sesión del 22 de Mayo en donde, a pesar de las advertencias de la oposición, y de algunos propios que advertían sobre la "vulnerabilidad" del procedimiento, la ordenanza se votó.

Visto en retrospectiva... ¿porque darle a la oposición semejante regalo? habida cuenta que, de haber seguido los mecanismos adecuados, las cuentas se hubiesen aprobado igual. O sea, esos tres votos no resultaban imprescindibles al efecto, el número lo tenían. Solo se requería que los tres Concejales en cuestión (Amancia Báez, Mariana Corrales y Andrés Watson), funcionarios todos ellos durante el período cuyas cuentas se estaban aprobando, se excusaran dando lugar a los suplentes.

Aquí entran en juego las interpretaciones, en primer lugar, fuentes cercanas al oficialismo alegan que, ese día, la incompatibilidad fue formulada por Daniel Zisuela, edil del Frente Renovador, pero en tono de pregunta, en un cuerpo en el cual existen varios antecedentes de ex funcionarios del Departamento Ejecutivo aprobando sus "propias" cuentas. De hecho hubo ediles  como Remigio Orivi Padilla, Jorge de Rosa o el mismo Julio Pereyra que, en sus momentos, aprobaron cuentas de períodos en los cuales revisaron parcialmente como Intendentes Interinos, sin recibir cuestionamiento alguno. Por otro lado, explican, existe una tendencia en no impedir el voto de un edil citando, por ejemplo, el caso de Nélida Ruiz quien, incluso, había llegado a ser detenida por un supuesto caso de extorción, cargo del que, finalmente, fuera absuelta. Por otro lado, al no estar las cuentas discriminadas por Secretaría desde el oficialismo alegan que, de ninguna manera, iban a aprobar “sus propios gastos”.

Ese día los Concejales del Frente Renovador y del Nuevo Encuentro prefirieron retirarse del recinto, ante la negativa de los concejales mencionados a excusarse del voto, enviando posteriormente sendos requerimientos de asesoría al propio Tribunal de Cuentas de la provincia.

La respuesta del área de Asuntos jurídicos del tribunal de cuentas fue clara. Mejor dicho..."demoledora", aunque no se trató de una sentencia sino de una respuesta a las interrogantes legales de la oposición y, aunque la misma no tenga fuerza operativa, el área adelanta "cuál sería su sentencia" llegado el caso de una denuncia formal, cosa que no sucediera… aun.

En ella se cita, como antecedente lo que sucediera en la Municipalidad de Salto, en ocasión de votarse algo parecido con la participación de un ex Secretario de Gobierno, señalando, en el caso varelense que “se estaría incurriendo en una incompatibilidad y en la vulneración de la división de poderes”. Más adelante, y citando el articulado de la Ley Orgánica de las Municipalidades cita el tema como un caso de “incompatibilidad manifiesta”.

Por otro lado, las sentencias del Tribunal de Cuentas suelen ser de tipo pecuniarias sobre los Concejales o intendentes que hayan recurrido en una irregularidad. No existe otra sanción, salvo una simbólica amonestación.

¿Se “cayó” la ordenanza y las cuentas se quedaron sin aprobación?. De ninguna manera, el paso del tiempo la convirtió en cosa juzgada pero como esto es política, señoras y señores, es lícito y lógico que la oposición requiera que el oficialismo pague el costo político de lo que ellos denominan “la soberbia del número”.

Fue el Concejal Dardo Otonello, del Frente Renovador, el que realizara una cuestión de privilegio en la última sesión, con el texto del Tribunal de cuenta en manos. En el desarrollo del debate se le sumó Héctor Salatino, del Nuevo Encuentro, quien impulsara la creación de una comisión investigadora. Ambos interpretaron aquella votación como una falta a la honorabilidad del cuerpo. Largo cuarto intermedio aunque infructuoso, el oficialismo no hizo lugar al pedido. Los Concejales del Frente Renovador y de Nuevo Encuentro se retiraron del recinto, hecho éste que fuera calificado por las huestes del Frente para la Victoria como un contubernio entre las dos bancadas.

Habrá cola.


elvarelense.com.ar

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