El intendente de Florencio Varela, Julio Pereyra, que no olvida la inquietud de diciembre por el colapso energético, busca apaciguar el reclamo de obras ante una compleja realidad en su distrito.
El calor de diciembre fue el problema más grandes que tuvo Julio Pereyra en los últimos tiempos. La falta de energía eléctrica, y agua potable, provocó un colapso que enfureció a los vecinos del popular distrito, hoy marcado por el crecimiento de es movimientos que preocupan al dirigente del justicialismo bonaerense.
Siempre protegido por la sintonía fina con el Gobierno Nacional, supo eludir escollos y dificultades, aunque las elecciones de medio término anticiparon los problemas que comenzarían a exponer su gestión.
Criticado por varios sectores, Pereyra saboreó la derrota del oficialismo con el Frente Renovador massista y atravesó serios inconvenientes, marcados por las demandas de los sectores sociales que no comulgan el estilo que lo mantiene desde 1992 al mando.
A principios de año, vecinos de Villa Argentina secuestraron un móvil del municipio en una muestra del enojo con el mandamás del partido y la empresa EDESUR, apuntada por todo el kirchnerismo aquellos días de colapso en Capital Federal y el Gran Buenos Aires.
Para que esa escena no se repita, comenzó a dialogar con las nuevas autoridades de la prestadora de energía eléctrica, a la que se le demandan obras en diferentes regiones del Conurbano. Según afirmaron desde la empresa, trabajan en una reafirmación global del sistema, antes de presentar un plan de inversiones que contiene la instalación de subestaciones, generadores, extensión de redes y “la suma de tecnología que optimizará notablemente el abastecimiento energético”.
Antonio Gerez, gerente general de EDESUR, prometió un trabajo sustancial que sustenten las promesas electorales del caudillo justicialista. “De estas inversiones, las cuales comprenden a Florencio Varela y municipios vecinos, estamos hablando de un monto de cerca de 200 millones de pesos”, afirmó Gerez, antes de una reunión con el bloque de concejales oficialistas (Nuevo Encuentro, Kolina y Túpac Amaru).
Pero estos días, a causa de varios cortes de energía en distintos puntos del territorio que maneja el presidente de la Federación Argentina de Municipios (FAM), quien reclamó “un seguimiento exhaustivo y permanente de los reclamos”, la alarma volvió a encenderse.
Según le dijeron desde Florencio Varela a Letra P, las promesas del ejecutivo para que 15 barrios reciban los beneficios del alumbrado público y los servicios básicos se otorgarán con el avance de las estructuras. algo logrado en la negociación con las asambleas vecinales.
Sólo resta esperar que las promesas no se conviertan en otro foco de reclamo ante un referente peronista de la vieja escuela, que poco a poco exterioriza las fisuras del armado que lo mantiene en el poder.
letrap.com.ar
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