Abandono y suciedad en la Rotonda de Alpargatas

Desde hace varias semanas no pasa el camión recolector, provocando así una tremenda acumulación de desperdicios que, a la vez, atrae cucarachas, moscas y ratas de gran tamaño. Abandono y suciedad en la Rotonda de Alpargatas La Rotonda de Gutiérrez, más conocida como la de Alpargatas, a la altura de Florencio Varela, presenta un triste panorama donde reina la ilegalidad y la mugre.
Allí, los vecinos denunciaron la presencia de puestos sin habilitación, bolsas de basura y de un sinfín de alimañas. En diálogo con este medio, Mónica describió que el triste panorama se completa con "los fuertes olores emanados por los restos de comida", aunque, también añadió que en algunas oportunidades se topan con "necesidades de seres humanos", dentro de los refugios de los colectivos. De tal forma que los pasajeros, que aguardan los colectivos que se dirigen tanto a Varela como a La Plata, prefieren esperarlos afuera "soportando el inmenso calor". Como si fuera poco, advirtió que desde hace numerosas semanas "no pasa por el lugar el recolector de basura", provocando así una "tremenda acumulación de residuos", que, a la vez, atrae "cucarachas, moscas y ratas de gran tamaño, que tranquilamente pueden transmitir diversas enfermedades". Por otro lado, señaló que la salud se ve afectada, además, por la falta de higiene de los puesteros que comercializan panchos o hamburguesas o choripanes. "No lavan los utensilios porque les cortaron el agua", recalcó indignada. "A tan sólo unos pocos vendedores los vi con bidones de agua para lavar sus elementos de cocina, vaya a saber cuál será el origen de la misma", se preguntó. También, exhortó al área de Higiene de la Municipalidad de Florencio Varela para que encabece "operativos de limpieza profunda en esa zona". Asimismo, Mónica reveló que en el área de la Rotonda de Gutiérrez "existen numerosos negocios sin la habilitación municipal correspondiente". Refugios usurpados Con mucha bronca, despachó que los refugios de los colectivos fueron "prácticamente usurpados para instalar una paradas de taxi o locales de comidas rápidas". "La parada de taxi cada día se parece más a una remisería porque cuenta con un escritorio y un teléfono donde toman los pedidos de sus clientes", relató. En la misma línea, remarcó que los propietarios de la agencia de taxi "no tienen vergüenza y exhiben su cartel como haciendo alarde de su impunidad". Similar situación sucede con un parador de venta de comidas rápidas, agregó la vecina, quien recordó: "Uno de los empleados que trabajaban allí había amenazado a mi marido por quejarse de la basura que arrojaban en los refugios"

Diario Popular