El panorama político local se mueve al compás de lo que sucede a nivel nacional y provincial. Si bien en el oficialismo todos aducen ser ultra kirchneristas o cristinistas, hay matices diversos como corresponde a un movimiento nacional como alega ser el peronismo en esta etapa actual.
Pero en los últimos meses, solapadamente, o no tanto, desde el gobierno nacional se dio luz verde a los ultra K para que comiencen a avanzar y a tomar posiciones, o pelear candidaturas a nivel legislativo para 2013 y apuntando a un «armado territorial» político de mayor envergadura para 2015.
Ello ya acontece, pese a la aparente tensa calma entre Scioli y Mariotto, a nivel provincial, mientras el gobernador amaga, pero nunca se decide, a acordar con las huestes de Francisco de Narváez, Rodríguez Saá, Barrionuevo, Moyano y Cariglino, o con la agrupación La Juan Domingo que pilotea Cacho Alvarez.
EVITAR FUGAS
Pero desde Olivos el mensaje fue claro a los «camporistas»: deben procurar arrinconar y alinear a los jefes comunales del Conurbano junto a la jefatura de Cristina, evitando fugas o coqueteos. A los díscolos, como ya está sucediendo, se les disputará el territorio con otras nóminas y a los más cercanos, se les pedirá intercalar apellidos de dirigentes más o menos juveniles en la futura nómina distrital o seccional.
Entre los intendentes dudosos, para el Poder, figuran Massa (Tigre), Giustoizzi (A. Brown), Mussi (Berazategui), Bruera (La Plata), entre otros. El de Quilmes, Gutiérrez, es un caso atípico debido al enfrentamiento que tiene con el senador Aníbal Fernández, y si allí hay pelea electoral, la misma puede resultar muy interesante.
El embate ha comenzado a producirse a través de un grupo denominado Unidos y Organizados, que aglutina a representantes distritales de la Kolina Ccorriente de Lliberación Nacional) de Alicia Kirchner, el Movimiento Evita, de E. Pérsico y La Cámpora, que manejan «el cuervo» Larroque y «Wado» De Pedro, entre otros.
Estos muchachos querrán disputar o acordar espacios de poder, pero la tarea no les será fácil en ningún municipio. «Tienen buena prensa, seguidores, pero les faltan mañas y estructuras», comentó un veterano dirigente peronista.
EN OBSERVACION
Con respecto a Florencio Varela, en esferas gubernamentales nacionales se lo considera a Julio Pereyra «un hombre de la primera hora» junto con Kunkel y el apoyo al actual modelo, aunque su relación política desde la FAM era mas fluida y mejor con Nëstor Kirchner que con Cristina Fernández. Por ello se dice que los K lo tienen «en observación», pero no resignan «armarle» algo vía la Kolina o La Cámpora, aunque saben que no tienen muchos adeptos en el distrito.
ESCASA EXPERIENCIA
Además, hay dirigentes considerados «propios» de Pereyra que responden al intendente o a Kunkel-Fioramonti, como es el caso del edil Tony Suárez, que alega ser el representante local del Movimiento Evita. Otros que figuran como dirigentes de la Kolina no han trascendido mucho que digamos, y algo
similar ocurre con los de La Cámpora.
Sin embargo, allegados a Pereyra deslizan que el jefe comunal ya está advertido de esa presunta maniobra política –si llega a producirse- de los de UyO y disparan que resistirá el posible embate con todas sus fuerzas y las mayoritarias agrupaciones que le responden como actual titular del PJ local.
COMO JUEGA?
Mientras tanto, se especula qué
actitud adoptará el legislador Carlos Kunkel en esta posible porfía, pues se lo ve más cercano a UyO que al peronismo distrital que conduce el PJ.
La duda, por ahora, subsiste. Pero el poderío económico, mediantea contratos, planes sociales y subsidios, de Alicia Kirchner, a través de Desarrollo Social nacional puede hacer variar la situación. La Colmena en Red
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