lunes, 19 de diciembre de 2011

El obispo cordobés asumió la diócesis de Quilmes, en una ceremonia que presidió Jorge Bergoglio

Se realizó el sábado la ceremonia de asunción del nuevo obispo de Quilmes, monseñor Carlos Tissera, quien sustituye a Luis Stockler, quien renunción al cumplir 75 años.  El flamante titular de la diócesis, que abarca los distritos de Quilmes, Florencio Varela y Berazategui, aseguró que "vengo llegando al paso de la mula malacara del cura Brochero, despacito, al trotecito".




Recordó que como alumno de Teología del Seminario de Villa Devoto había tenido de profesor a monseñor Jorge Novak, y lo habían despedido con todo cariño cuando en tiempos oscuros y difíciles de la Argentina, año 1976, fue designado obispo de Quilmes. En ese sentido, reflexionó que nunca hubiera imaginado que se convertiría años después en su sucesor.



También mencionó que había estado con Novak el 5 de julio de 2001, es decir cuatro días antes de su fallecimiento y que Novak le había dicho que cuando él entregara la diócesis a su sucesor le iba a decir que no le entregaba la diócesis con un programa especial "porque el progrma de esta diócesis es Cristo. Un Cristo antropológico, un Cristo encarnado en los hombres, en los pobres".



Tissera manifestó su alegría por el hecho de "estar bajo el patrocinio de la Inmaculada Concepción. Desde niño la invoco como madre y protectora. Es la patrona de mi parroquia y diócesis de origen, de la villa de la Concepción del Río Cuarto.



Y agregó: "!Cómo no invocar a la pura y limpia concepción en estas tierras donde desde antes de que llegaran los diezmados y explotados hombres de los valles calchaquíes, los kilmes, ya se había quedado junto al río de Lujána la preciosa imagen de la Virgen Gaucha! Sea ella la luz que ilumine y guíe esta nueva etapa en la vida de la Iglesia que peregrina en Quilmes, Berazategui y Florencio Varela. Así sea. Viva Jesús, Viva María".



La ceremonia se extendió durante casi tres horas, ya que después de la extensa misa de asunción, que presidió el cardenal Jorge Bergoglio, acompañado por obispos, sacerdotes, seminaristas y diácones de la diócesis y de otras diócesis -desde una pantalla se pudo apreciar el acto en el atrio de la catedral, ya que adentro estaba colmada- el obispo Tissera recibió el saludo y la presentación de distintos integrantes de la comunidad, desde un matrimonio quilmeño, organizaciones, un pastor evangélico, religiosos, etcétera, que le fueron dando un panorama de la situación del lugar que tendrá que pastorear.



Muchos jóvenes, de distintas parroquias de la extensa diócesis -que tiene más de un millón trescientos mil habitantes- saludaron también al flamante obispo.

Tissera agradeció a los medios de prensa y destacó que "a través de ustedes Jesús eude seguir hablando a las multiutudes" y adelantó que el 23 de diciembre a las 10, además de enviar un mensaje de Navidad recibirá a los periodistas en conferencia de prensa en el Obispado.



Sin duda, fue un sábado de gloria para la comunidad católica quilmeña, que también alcanzó a todos los ecumenistas, que quisieron acercarse y desearla una excelente labor pastoral a este obispo cordobés, que reconocio que cuando se enteró el pasado 12 de octubre de su designacion se asombró y sorprendió. "Desde que el Santo Padre, Benedicto XVI, me ha elegido para pastorear esta porción del pueblo de Dios he experimentado que Jesús me invita a dejar la orilla de lo conocido, de lo seguro, que es vivir en diócesis del interior del país, donde nací y crecí, para encarnarme en esta vital y superpoblada diócesis de Quilmes.



Durante su extensa homilía, el obispo tuvo palabras de reconocimiento y de elogio al padre obispo Novak y también agradeció al padre obispo Luis Stockler por el apoyo que recibió para conocer lo que le depara esta diócesis, ya que él viene de la de San Francisco Córdoba, sin duda, muy diferente a la quilmeña.

El Sol Quilmes

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