viernes, 19 de noviembre de 2010

OPERARIOS DEFENDIERON SUS FUENTES DE TRABAJO AL IMPEDIR EL REMATE DE MAQUINARIAS

Los operarios de Metal Varela integrantes de una cooperativa que hace años recuperaron una fábrica quebrada, ayer tuvieron que defender sus maquinarias ante la amenaza de un remate judicial.
Repentinamente la tranquilidad de la cuadra de Abrahan entre Alvarado y Braille, se vio alterada por la presencia de sórdidos personajes que bajaban de poderosos y modernos autos y se iban concentrando frente a la metalúrgica, merodeaban y “revoloteaban” el lugar cuasi aves de rapiña; no eran ni más ni menos que integrantes de la llamada “liga” que cual “pájaro de mail agüero” aparecen cuando a algunos les van mal las cosas y se avecinan los tristemente célebres remates judiciales.



De acuerdo a lo manifestado a Varela al Día por el presidente de la cooperativa de la fábricas recuperada Metal Varela, Victorio Coronel, estaban a la espera del oficial de justicia en lo comercial, ya que habían sido notificados que por orden y cuenta de la empresa Profumet SRL (una proveedora de insumos para fundidores con domicilio en Wilde) se les embargarían activos por una deuda comercial.



Osvaldo Pérez, síndico de la cooperativa, también hace su aporte a este medio y remontándose en el tiempo nos informa que se trata de una cuenta de vieja data por un importe de $ 26.000.- contraído con la demandante que provee insumos para fundidores.

-Nosotros siempre quisimos saldar esa deuda- nos manifiesta Pérez,: -pero ellos cada vez que nos reuníamos para fijar un plan de pagos, nos sumaban más y más intereses, punitorios, recargos y no sé cuantas cosas más, a nosotros se nos hacia imposible acceder a un plan de pago de esa manera y reconocer una deuda monstruosa que arrancó con $ 26.000.-

A diálogo se suma el presidente de la cooperativa, Victorio Coronel, para aportar: –esta fábrica la tomamos quebrada, sus dueños la abandonaron y nos dejaron en la calle, por años estamos trabajando con retiros, todos por igual de $ 200 o $ 300 por semana, formamos una cooperativa, desde el año 2001 estamos tratando de encaminarla, los proveedores nos apoyaron con refinanciamientos a largo plazos que estamos cumpliendo, además son deudas que no las contrajimos nosotros, algunas son deudas de la época en que esto era Metalúrgica Caratti, los que se fueron y nos dejaron en la calle: pero parecería que la gente de Profumet SRL piensa que somos tontos y nos quieren sacar todo a los “doce gatos locos” que hoy integramos la cooperativa y defendemos las fuentes de trabajo con dignidad-.



Poco antes de las 11 de la mañana se hizo presente el oficial de justicia con representantes de la demandante y sus abogados con la orden de: previa exhibición de las instalaciones de procediera al remate judicial en la misma planta; fue en ese entonces que tanto Coronel como Pérez y los demás componentes de la cooperativa se anoticiaron que les venían a rematar (7) siete máquinas, casi el 50% del activo de producción de la metalúrgica, por una deuda original de $ 26.000.-



Ante tal avasallamiento, Coronel y Pérez se contactaron con el secretario general de la Unión Obrera Metalúrgica de Quilmes Jorge Córdoba y colegas de fábricas recuperadas para contar con un apoyo ante tan grave circunstancia; casi de inmediato el barrio se comenzó a poblar con la llegada de integrantes de otras fábricas recuperadas e integrantes del congreso de delegados de la UOM.



Repentinamente la tranquilidad del mediodía de Villa del Plata se vio alterada con la presencia de grupos antagónicos, por un lado, el personal de Metal Varela con el apoyo de la UOM y fábrica recuperadas, por el otro los representantes de Profumet SRL con sus abogados, y en un costado ansiosos y expectantes los integrantes de “la liga” a la espera de la señal de largada para fagocitarse las máquinas, la empresa y la fuentes de trabajo de los desesperados operarios que en sus rostros se veía la amargura de la situación que vivían y recordaban tristemente los viejos tiempos de lucha para recuperar la quebrada metalúrgica de los Caratti.



En defensa de las maquinarias los operarios, con el apoyo de sus colegas de fábricas recuperadas e integrantes de la UOM, formaron una valla humana e impidieron el paso del oficial de justicia y los “eventuales compradores”, existieron forcejeos, insultos hasta empujones para evitar que ingresaran a la planta.



Cuando los desmanes parecían acrecentarse se hicieron presente algunas unidades policiales de la comisaría 3ª al mando del 2º jefe Marcelo Michia y entre idas y vueltas las demandas se encausaron en diálogo y luego de un tiempo el oficial de justicia determinó dejar sin efecto el remate judicial y que las actuaciones siguieran por cuenta de los letrados de la cooperativa y la demandante en el fuero comercial de la justicia.



Recién en ese entonces se les borró de los rostros la preocupación a los operarios de Metal Varela, quienes por un tiempo continuarán a salvo con sus fuentes de trabajo, decimos por un tiempo por que a más de una década todavía no se encuentra perfectamente establecido los alcances, los derechos y las propiedades de la “fábricas recuperadas”.



Igualmente se había ganado otra batalla, la satisfacción de haber defendido sus herramientas de trabajo, de poder ver al regreso al hogar con orgullo a sus hijos y sentirse plenos de alegría como en aquella tarde del 5 de diciembre de 2001 cuando la cooperativa Metal Varela recibió la primera orden de trabajo.



LA HISTORIA DE METAL VARELA





Hablar en el 2010 de una industria que exporta al mundo, es algo cómodo y fácil para quien hace esta nota, con parámetros actualizados de una empresa recuperada y puesta a funcionar por sus propios trabajadores; pero deberíamos retrotraernos una década para conocer las penurias que debieron atravesar estos operarios metalúrgicos que quedaron en la calle por irresponsabilidad e inoperancia de un grupo empresario, que le importó muy poco el momento que vivían y el sombrío futuro laboral.-

La historia se inicia muchos años antes con el cierre de la fábrica Metalúrgica Caratti, la toma de las instalaciones por parte de sus empleados, la defensa de la fuente laboral, la incertidumbre de treinta personas con sus cargas familiares, otra empresa recuperada por sus trabajadores, otra cooperativa que emerge como el Ave Fénix, otra esperanza en marcha……

Osvaldo Pérez, que fue quien nos resumió la historia de ésta década y nos dice: - No nos podemos olvidar de que nosotros arrancamos en un estado de sobrevivencia. Luego fuimos creciendo y buscando las mejores alternativas para el conjunto. Hoy estamos en un crecimiento, en la lucha por ser de una vez por todas una empresa que dé el resultado por el cual la iniciamos.

Cuando nosotros encaramos esta patriada prácticamente era la única alternativa para mantener la fuente de trabajo. Al principio la decisión de los clientes fue irse, ya que no confiaban en que un grupo de trabajadores podía llevar adelante una fábrica. Lo que hicimos nosotros fue volver a esa costumbre de nuestros viejos, que se daban la mano, ponían la cara y decían «quédese tranquilo que yo me hago responsable». Lo único que teníamos era eso, la palabra. Hubo empresarios que sí entendieron el desarrollo de lo que estábamos armando y hubo otros a los que fuimos convenciendo y eso fue generando dinámicas distintas con el trabajo.

Desde 1999 hasta fines del 2001 (la primera orden de trabajo llegó el 5 de diciembre de 2001) fue un período de «recuperación» y capacitación constante: Recuperar la confianza de los proveedores, reinsertarse en el mercado comercial, iniciar una cadena productiva fue marcando a cada uno de los compañeros. Esta fue una construcción, una experiencia de la autogestión.

No hay comentarios:

Publicar un comentario